Infertilidad secundaria: por qué el embarazo puede no repetirse

La infertilidad secundaria es una condición que puede afectar a cualquier pareja que ya ha tenido hijos. No es solo un término médico, sino también un problema real al que enfrentan miles de familias en el mundo.

Este diagnóstico significa que los embarazos anteriores fueron exitosos, pero que ahora, a pesar de tener una vida sexual regular sin anticonceptivos, la pareja no logra concebir un hijo durante un año. Si la mujer tiene más de 35 años, este período se reduce a seis meses, lo que hace que la cuestión sea aún más urgente. Surge una pregunta legítima: ¿por qué, a pesar de la experiencia y el deseo, es más difícil volver a quedar embarazada?

Según las estadísticas, del 10 al 15 % de las parejas que ya son padres enfrentan dificultades al intentar concebir nuevamente. A primera vista, esta cifra puede parecer insignificante, pero significa que una familia de cada diez, tras el nacimiento de un primer hijo, puede de repente encontrar obstáculos en el camino hacia un nuevo embarazo.

Causas de la infertilidad secundaria

Cambios relacionados con la edad

La edad es uno de los principales factores que influyen en las posibilidades de concepción. La fertilidad femenina comienza a disminuir después de los 30 años, y a partir de los 35, este proceso se vuelve más pronunciado. La calidad de los óvulos se deteriora, y la probabilidad de concepción disminuye. Por ejemplo, en mujeres de 35 a 39 años, la probabilidad de embarazo es solo del 15 al 20 % por ciclo. Los hombres también enfrentan una disminución en la calidad del esperma con la edad, lo que puede dificultar el proceso de concepción.

Factores médicos

La endometriosis es una enfermedad crónica en la que un tejido similar al endometrio se desarrolla fuera del útero. Esto provoca inflamación, formación de adherencias, desequilibrio hormonal y una disminución en la calidad de los óvulos, lo que afecta considerablemente la fertilidad. En nuestro blog, puedes leer: Todo lo que necesitas saber sobre la endometriosis.

El síndrome de ovario poliquístico (SOP) es un trastorno endocrino caracterizado por una ovulación irregular, niveles altos de andrógenos y resistencia a la insulina. Esto resulta en dificultades para concebir debido a la anovulación y a un mal funcionamiento de los ovarios. En nuestro blog, puedes leer: Síndrome de ovario poliquístico (SOP).

Los fibromas uterinos son tumores benignos que deforman la cavidad uterina, impidiendo la implantación del embrión. También afectan la irrigación sanguínea del útero, dificultando el mantenimiento del embarazo.

La obstrucción de las trompas de Falopio es uno de los principales factores de infertilidad secundaria. Las trompas pueden obstruirse por infecciones, cirugías o endometriosis, lo que dificulta la fertilización. En nuestro blog, puedes leer: Tratamiento y diagnóstico de la obstrucción de las trompas de Falopio: enfoques y métodos modernos.

Las infecciones – enfermedades como la clamidia o la gonorrea pueden causar inflamación y formación de adherencias. La vaginosis bacteriana también puede modificar la microflora vaginal y crear obstáculos para la concepción.

Causas hormonales

El equilibrio hormonal es esencial para la concepción. Trastornos de la tiroides, niveles elevados de prolactina, exceso de andrógenos o resistencia a la insulina pueden tener un impacto importante en la ovulación, el ciclo menstrual y la capacidad de quedar embarazada. Las variaciones en los niveles de FSH, LH, progesterona y estradiol determinan la calidad y regularidad de la ovulación.

El impacto del estrés

El estrés es uno de los factores importantes que perjudican la fertilidad. El estrés crónico activa la producción de cortisol, lo que altera el equilibrio hormonal, inhibe la ovulación y favorece el desarrollo de trastornos metabólicos. Además, las consecuencias psíquicas del estrés (ansiedad, depresión, agotamiento emocional) reducen la calidad de vida y complican los intentos de concepción.

Diagnóstico de la infertilidad secundaria

Un examen completo permite determinar las causas del problema. Incluye:

• Un examen médico general y recopilación de antecedentes médicos;
• Análisis hormonales (FSH, LH, estradiol, progesterona, prolactina);
• Ecografía de órganos pélvicos, tiroides y glándulas mamarias;
• Verificación de la permeabilidad de las trompas uterinas (histerosalpingografía);
• Laparoscopía en caso de sospecha de endometriosis u otras patologías;
• Espermatograma para evaluar la calidad del esperma;
• Pruebas genéticas en caso de sospecha de factores hereditarios;
• Evaluación psicológica para detectar la influencia del estrés.

Infertilidad secundaria y métodos de FIV

Una de las formas más efectivas de superar la infertilidad secundaria es recurrir a técnicas de reproducción asistida. El método más común es la FIV (fertilización in vitro). Este procedimiento consiste en fertilizar un óvulo con un espermatozoide en laboratorio, y luego transferir el embrión en la cavidad uterina. Para parejas con obstrucción de las trompas de Falopio, problemas hormonales o inmunológicos importantes, la FIV puede ofrecer una verdadera oportunidad de convertirse en padres por segunda vez.

En los casos donde la calidad de los óvulos de la mujer disminuye por edad o factores médicos, se utiliza la FIV con donación de óvulos. Esto permite a mujeres que no pueden usar sus propios óvulos experimentar la alegría de un segundo embarazo y el nacimiento de otro hijo. Los óvulos de donantes son sometidos a una rigurosa selección, lo que aumenta considerablemente las posibilidades de concepción.

Otra opción es la FIV con doble donación, que utiliza tanto óvulos como esperma de donantes. Este método se usa cuando ambos miembros de la pareja tienen graves problemas de fertilidad. Para muchas parejas, es la única forma de realizar su sueño de tener un niño.

En la clínica NatuVitro, cada uno de estos programas se implementa teniendo en cuenta las necesidades individuales de los pacientes, ofreciéndoles un alto nivel de seguimiento médico y apoyo emocional.

Aspecto emocional

La infertilidad secundaria es una prueba psicológica difícil. Las parejas pueden sentir impotencia, culpa e incertidumbre. Es importante recordar que esta situación no significa una esterilidad definitiva, sino que simplemente indica la necesidad de encontrar la causa y las formas de superarla.

Conclusión

La infertilidad secundaria no es una condena, sino un desafío que puede superarse gracias a la medicina moderna y a un apoyo completo. Si el embarazo no ocurre en 6 a 12 meses, es recomendable consultar a especialistas. Un diagnóstico temprano aumenta las posibilidades de éxito.

En la clínica NatuVitro, prestamos atención no solo a las causas médicas de la infertilidad, sino también al estado psicológico de la pareja. Ofrecemos un enfoque personalizado, un diagnóstico profesional y acompañamiento en cada etapa del proceso. Nuestro objetivo es ayudarte a volver a escuchar las risas de los niños en tu hogar.