La fertilidad en el hombre

Las mujeres nacen con un cierto número de óvulos, cuyo número disminuye cada año. El cuerpo del hombre, por su parte, produce constantemente nuevos espermatozoides: aproximadamente 1,500 espermatozoides se producen cada segundo.

En materia de fertilidad, ambas parejas juegan un papel crucial en la concepción. Si bien la fertilidad femenina es a menudo el tema prioritario, la fertilidad masculina es igualmente importante. Estudios muestran que el factor masculino es responsable del 50% de los problemas de concepción. La fertilidad masculina se ve afectada por diversos factores como el estado de los espermatozoides, los niveles de hormonas y la anatomía de los órganos reproductores.

A diferencia de la infertilidad femenina, la infertilidad masculina a menudo no presenta signos evidentes, lo que significa que muchos hombres no son conscientes de sus problemas de fertilidad hasta que tienen dificultades para embarazar a su pareja. Por eso, la calidad y la cantidad de esperma son factores cruciales para la concepción.

Diagnosticar la fertilidad en el hombre

Uno de los primeros pasos en la planificación familiar es un examen completo del estado de salud del hombre. El espermograma es un elemento clave en el diagnóstico de la fertilidad masculina.

Esta prueba evalúa varios parámetros, cada uno de los cuales proporciona información importante sobre la salud de los espermatozoides y el potencial de fertilidad:

• Número total de espermatozoides en la muestra de semen: cuanto mayor es el número de espermatozoides, mayores son las posibilidades de embarazo.
• La concentración de espermatozoides: mide el número de espermatozoides por mililitro de semen, lo que es un indicador importante de la fertilidad.
• Volumen: indica la cantidad de líquido producida durante la eyaculación necesaria para transportar los espermatozoides hasta el óvulo.
• Motilidad: evalúa la capacidad de los espermatozoides para moverse y alcanzar y fertilizar el óvulo.
• Morfología: examina el tamaño y la forma de los espermatozoides; las anomalías pueden indicar problemas de fertilidad.

Causas de la deterioración de la fertilidad masculina

Los desequilibrios hormonales, como un bajo nivel de testosterona o una enfermedad tiroidea, pueden interferir con la producción de espermatozoides y la fertilidad en general. Los problemas genéticos, como anomalías o mutaciones cromosómicas, también pueden afectar la calidad del semen y reducir la función de fertilidad.

Una mala alimentación, la inactividad, el tabaquismo y el consumo de alcohol tienen un impacto negativo en la salud reproductiva. Sin embargo, el esperma se renueva cada 60 a 90 días, por lo que la adopción de hábitos saludables puede conducir a mejoras significativas.

Entre las enfermedades y condiciones que perjudican la fertilidad masculina se incluyen:

• Varicocele: hinchazón de las venas que drenan el testículo, lo que provoca una disminución de la calidad y cantidad de los espermatozoides debido a la alteración de la circulación sanguínea normal.
• Infecciones: las infecciones de transmisión sexual pueden afectar la producción de semen o bloquear el paso de los espermatozoides.
• Anticuerpos anti-espermatozoides: anticuerpos sintetizados en el cuerpo del hombre en respuesta a los espermatozoides.
• Tumores: el cáncer o los tumores que afectan a los órganos reproductores pueden perjudicar la fertilidad.
• Testículos no descendidos: cuando los testículos no descienden al escroto durante el desarrollo del feto, esto puede reducir la fertilidad.
• Anomalías cromosómicas: los trastornos genéticos como el síndrome de Klinefelter o la fibrosis quística provocan un desarrollo anormal de los órganos reproductores y pueden llevar a la infertilidad.
• La terapia de reemplazo de testosterona, esteroides o quimioterapia también pueden tener un efecto negativo sobre la producción de espermatozoides.

¿Cuándo debe un hombre buscar ayuda?

Un hombre debería hacer una cita con un médico especialista si él y su pareja han estado intentando concebir sin éxito durante un año, a pesar de relaciones sexuales regulares sin protección. Si el hombre tiene más de 35 años, este período se reduce a seis meses. Un estilo de vida saludable puede aumentar la fertilidad, pero si no ha habido embarazo después de 12 meses, es necesario consultar a un especialista para una evaluación de fertilidad.

¿Cómo aumentar la fertilidad en el hombre?

Para responder a la pregunta "¿Cómo aumentar la fertilidad?", los especialistas en reproducción recomiendan lo siguiente:

• Comer bien: consumir frutas, verduras, productos integrales, proteínas magras y grasas saludables, y agregar zinc, selenio y vitamina C a su dieta. No olvide beber mucha agua limpia y no carbonatada cada día.
• Practicar actividad física: una actividad física moderada ayuda a mejorar la salud general y a apoyar la fertilidad.
• Gestionar el estrés: practicar meditación, respiración profunda o yoga para reducir el nivel de estrés.
• Evitar los malos hábitos: dejar de fumar, reducir el consumo de alcohol y evitar las drogas.
• Mantener un peso normal: tanto el bajo peso como el sobrepeso pueden perjudicar la calidad del semen.
• Realizar controles médicos regulares: la detección y tratamiento oportunos de problemas de salud pueden mejorar la fertilidad.

Tratamiento de la esterilidad masculina

El tratamiento de la esterilidad masculina puede resultar difícil, pero los métodos modernos ayudan a muchas parejas a realizar su sueño de convertirse en padres.

Un enfoque común es la ICSI (inyección intracitoplasmática de espermatozoides), una forma de FIV en la cual un solo espermatozoide se inyecta directamente en el óvulo para facilitar la fecundación. Este método se considera el mejor para hombres con un bajo número de espermatozoides o con pobre movilidad de los espermatozoides.

La TESE y la micro-TESE son dos técnicas quirúrgicas utilizadas para tratar la infertilidad masculina en casos de problemas de espermatogénesis, incluyendo la azoospermia (ausencia de espermatozoides en el eyaculado). Estas técnicas pueden ser efectivas en el marco de un programa de fertilización in vitro (FIV) o ICSI:

• La TESE (extracción testicular de espermatozoides) es un procedimiento en el cual se extrae quirúrgicamente tejido testicular para buscar espermatozoides. La intervención se realiza bajo anestesia general o local. Se examinan trozos de tejido testicular al microscopio para buscar espermatozoides móviles que puedan ser utilizados para ICSI.
• La micro-TESE (extracción microquirúrgica de espermatozoides testiculares) es una versión más avanzada de la TESE que utiliza un enfoque microquirúrgico para identificar con mayor precisión los espermatozoides en el tejido testicular. Con un microscopio, el cirujano puede identificar con mayor precisión las áreas del testículo que pueden contener espermatozoides.

Si la infertilidad masculina está relacionada con factores del estilo de vida o enfermedades, puede recomendarse modificar el estilo de vida mejorando la dieta, aumentando la actividad física, evitando los malos hábitos y gestionando el estrés. Mejorar la dieta, reducir el consumo de cafeína y alcohol, hacer ejercicio regularmente, gestionar el estrés y evitar malos hábitos como fumar y vapear pueden mejorar la calidad de los espermatozoides y la fertilidad en general.