FIV exitosa después de 40 años: de qué depende el resultado

Con la edad, la función reproductiva en la mujer disminuye. La razón es una disminución progresiva de la reserva ovárica. A partir de los 32-35 años, la cantidad y calidad se degradan y el número de óvulos viables disminuye. Con la edad, la probabilidad de concebir un hijo disminuye naturalmente. Por otro lado, las posibilidades de obtener resultados positivos con la FIV después de los 40 años son bastante altas. Hablaremos de los factores de los que depende el éxito y de cómo prepararse correctamente para lograr un embarazo.

Características de la FIV en mujeres mayores de 40 años

El médico recomendará la técnica más adecuada para la pareja en los casos en que se identifique la infertilidad y no pueda ser tratada por otros medios. Para las parejas sanas mayores de 40 años, la FIV también puede ser indicada para realizar un diagnóstico genético preimplantacional de los embriones. El análisis identifica posibles patologías genéticas y cromosómicas y ayuda a minimizar el riesgo de que un niño desarrolle el síndrome de Down y otros trastornos. En las pacientes mayores de 40 años, el médico tiene en cuenta los siguientes factores: 

• La disminución de la eficacia de la estimulación hormonal, que se realiza para madurar un mayor número de óvulos viables 
   
• La disminución del número de embriones sanos obtenidos y aptos para el traslado al útero 
   
• La mayor probabilidad de utilizar el procedimiento ICSI para una fecundación exitosa del óvulo 
   
• Las posibles dificultades con la implantación de embriones.

¿Qué dicen las estadísticas?

Las posibilidades de quedar embarazada por sí sola en el mes siguiente a una relación sexual regular no protegida varían según la edad de la mujer: la probabilidad más alta de éxito en la concepción se ha registrado 

• en mujeres de 20 años y es de aproximadamente 25 %; 
   
• entre 30 y 35 años, esta cifra cae al 15 %; 
   
• a los 40 años y más, la probabilidad es de aproximadamente 5 %. 
   

Para las mujeres de 38 a 40 años, la probabilidad de un embarazo exitoso después de haber utilizado técnicas de PMA (Procreación Médicamente Asistida) es de aproximadamente 22 %, a los 42 años, el valor disminuye al 12 %, después de los 42 años entre  3-4 % y a los 44 años menos del 2%.
También es importante recordar para las pacientes que consideran concebir que, con la edad, aumentan los riesgos de desarrollar anomalías cromosómicas en el embrión. En mujeres menores de 30 años, aproximadamente el 30 % de los óvulos presentan anomalías cromosómicas, a los 40 años, es aproximadamente el 60 % y a los 44 años hasta el 90 %.

FIV después de los 40 años con sus propios óvulos

El médico selecciona la mejor técnica de PMA para la paciente, teniendo en cuenta su estado de salud y otros factores. Uno de los protocolos utilizando su propio ovocito puede ser prescrito: la FIV con estimulación. Para obtener un número elevado de óvulos en un solo ciclo, el médico prescribe un tratamiento de medicamentos hormonales; La FIV en ciclo natural después de los 40 años se utiliza si la toma de medicamentos hormonales está contraindicada, o en los casos en que la estimulación no da el resultado deseado; La FIV con Maduración Ovocitaria implica la recolección de óvulos inmaduros del folículo ovárico y su maduración fuera del cuerpo de la mujer, una posterior fecundación por el método ICSI y el traslado del embrión seleccionado según un ciclo natural; FIV utilizando los propios óvulos crioconservados de la paciente. Por ejemplo, si la paciente planea una criopreservación de sus óvulos antes de los 35 años anticipándose a un embarazo tardío.
 

FIV con donante de óvulos

Esta solución se recomienda a las mujeres con baja reserva ovárica, falta de ovulación y altos riesgos de desarrollar trastornos genéticos o cromosómicos. El uso del óvulo de una donante permite obtener resultados incluso por encima de los 45 años. El desarrollo de la intervención depende de la opción elegida: ya sea el traslado de un óvulo de donante previamente congelado; o la recuperación de un ovocito fresco, que requiere la sincronización de los ciclos de la donante y la receptora. Unos días antes del traslado previsto, a la mujer se le prescribirá un tratamiento hormonal, que estimula el engrosamiento del endometrio para aumentar las posibilidades de implantación.

¿Por qué no se implanta el embrión durante la FIV?

En algunos casos, pueden ser necesarios varios ciclos para lograr un embarazo. Un resultado negativo después de la FIV puede deberse a un traslado de embriones de calidad insatisfactoria. Para evitar esto, se aconseja a las pacientes mayores de 40 años apoyarse no solo en un examen visual del desarrollo de los óvulos fecundados, sino también prever un DPI (Diagnóstico Preimplantacional). El resultado también puede ser negativo en caso de insuficiencia de grosor del endometrio. Un médico especialista en reproducción monitorea el crecimiento de las células en la capa interna del útero y prescribe medicamentos hormonales que ayudan a engrosarlo hasta el tamaño deseado. También es posible posponer el traslado para estar dentro de la ventana de implantación óptima, especialmente en ciclos irregulares. Un médico experimentado descubrirá las características del paciente y calculará individualmente una fecha apropiada. Otra causa de fracaso es la presencia de una membrana proteica del embrión demasiado densa. Para una implantación exitosa en el útero, el blastocisto debe deshacerse de su capa protectora. Para ayudar al embrión, el médico realizará una eclosión haciendo pequeñas incisiones en la membrana antes de transferir el blastocisto al útero. Problemas endocrinos, trastornos inmunológicos y procesos inflamatorios de los órganos reproductores femeninos también son factores negativos para una buena implantación. Es importante someterse a un examen completo antes de la FIV para excluir tales factores.

Cómo aumentar sus posibilidades de éxito

Si, al intentar quedar embarazada sola a los 35 años, el diagnóstico de infertilidad se establece solo después de seis meses de intentos infructuosos de concepción natural, se aconseja a las mujeres mayores de 40 años que soliciten inmediatamente consejo a un ginecólogo o a un especialista en reproducción. Y si durante el examen el médico revela indicaciones para la FIV, es importante comenzar los preparativos lo antes posible. Es necesario normalizar el sueño, la nutrición, la actividad física y dejar de consumir alcohol y fumar. La obesidad puede convertirse en un obstáculo para el éxito de la FIV, por lo que una mujer debe normalizar su peso. También es importante garantizar el tratamiento rápido de las enfermedades detectadas y seguir las recomendaciones de un especialista en reproducción en cuanto a la toma de ciertos medicamentos. La crioconservación de óvulos realizada por una mujer antes de los 35 años puede aumentar sus posibilidades de concepción en un embarazo tardío.